Hoy los ciberataques han incrementado y son cada vez más sofisticados, principalmente debido al uso de la inteligencia artificial.
Hoy una de las amenazas más preocupantes es el ransomware que ha evolucionado y se ha convertido en una herramienta para bloquear sistemas y su exigencia en los rescates en la liberación datos críticos.
Pese a los esfuerzos de las áreas de seguridad para interrumpir estas prácticas, la facilidad para crear y distribuir malware mantiene a los ciberdelincuentes un paso adelante.
Ante ello, la microsegmentación es una práctica robusta de seguridad cibernética frente ataques graves que comprometen la integridad de los sistemas.
Es una técnica de seguridad que divide una red en segmentos pequeños y específicos para proteger aplicaciones, datos y recursos dentro de la infraestructura de TI.
La microsegmentación crea reglas de seguridad granulares que limitan el acceso entre aplicaciones, servicios y usuarios en función de sus necesidades y permisos específicos.
Esta estrategia es esencial en la contención de ataques de ransomware desde su punto de entrada, con el objetivo de no permitir esparcirse a otros segmentos para limitar y contener un ataque.
- Protección de centros de datos
- Seguridad en la Nube
- Cumplimiento normativo
- Protección de aplicaciones críticas